Jimin abrió sus ojos lentamente, la luz del sol llegaba levemente a su cuerpo y a su rostro, haciendo que se cubra con las sábanas para no ver tal brillo.

—Buen día —habló alguien a su lado haciéndolo dar un salto por el susto.

—¿J-Jungkook? ¿Por qué estás en mi habitación? —casi cae de la cama, pues el rostro del alfa estaba muy cerca cuando habló.

—¿Tu habitación? Si es la que me prestaste para quedarme... ¿No lo recuerdas? Anoche viniste a eso de las 2 de la mañana, entraste a mi cama y me abrazaste, quise irme porque sabía que estabas sonámbulo, pero cuando me paré empezaste a llorar y no me quedó de otra que dormir contigo.

—¿Me estás diciendo que te obligué?

—¡No! Claro que no, si quería hacerlo, pero en verdad no sabía que hacer porque estabas sonámbulo y pensé que te molestarías al despertar y...

—No, está bien, hace mucho tiempo que no me pasaba... ugh... debió ser muy incómodo para ti —cubrió su rostro con sus manos por la vergüenza—. Lo siento, me iré ahora —era su casa, pero iría a su habitación a pensar lo tonto que se estaba comportando.

—¿Quieres desayunar? Puedo prepararte algo, no, quiero prepararte algo —se paró igualmente.

—No preguntes si lo harás de todas maneras — seguía tímido y cohibido—. Buen día —quiso salir de la habitación, pero una mano en su muñeca se lo estaba impidiendo.

—Buen día —besó su frente soltando su muñeca y sujetando la puerta para que su omega pueda pasar.

—Si...

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—Te juro que antes de probar esto, odiaba las nueces —Jimin comía un pan con chocolate y nueces que Jungkook acababa de preparar.

—La cosa es cómo lo preparas —sacudió sus manos satisfecho con el resultado de aquel simple desayuno.

Jimin estaba tan complacido que no se fijó la hora, eran ya las 9 de la mañana.

—¡Tengo que ducharme! ¡Tienes que ducharte! O llegaremos tarde —se fijó la hora cuando acabó su desayuno.

Jaló a Jungkook de la mano llevándolo a uno de los 3 baños en casa, le dio dos toallas y ropa que con suerte le quedaría.

Jimin se metió a duchar a otro de los baños, se bañó rápido y se cambió de la misma forma, jeans celestes, remera amarilla a rayas encima de una remera de mangas largas verde tirando al amarillo.

—Jungkook, ¿te quedó la ropa que te traje? Es tres tallas más grande que la mía y ni yo sé porqué la compré al principio, pero creo que es útil en estas situacio... —sus palabras se cortaron al ver a Jungkook, pantalones y camisa negra, se veía bastante bien, tanto que se quedó embobado viendo lo bien que le quedaba.

—Yo creo que si me queda bien —miró a Jimin y se dio cuenta de cómo este lo miraba—. ¿Está todo bien? —se acercó a él.

—¿Q-Qué? Cómo sea... vamos a trabajar, hoy cerramos temprano, saldremos a otro sitio después de cerrar, así que apresúrate.

—¿A dónde iremos?

—Tú sólo sígueme y cállate —sus mejillas calentaron, así que se dio la vuelta y se dirigió a la puerta con el alfa detrás.

Jungkook sonrió asintiendo y siguiéndolo, oh, que lindo es.

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Estaban caminando hacia su trabajo, faltaban 20 minutos así que no había necesidad de correr o apresurarse.

—Oh, Jimin —Jungkook se mostró algo preocupado al hablar a su omega.

—¿Qué pasa, Jungkook?

—Tu mano se ve algo cansada, deja te la sostengo —y tomó su mano con un clásico y a la vez original truco.

Jimin se limitó a reír dejando al alfa sostener su mano, se lo había ganado.

Caminaron así unas 4 cuadras, sus manos estaban nerviosas, pero seguían unidas, Jimin estaba por hablar hasta que otra voz los interrumpió.

—¡Jungkook! —era Taehyung, su amigo y compañero de cuarto.

Jimin se separó rápidamente de la mano de Jeon metiendo su propia mano a su bolsillo, como si no hubiera pasado nada.

—Oh, Tae —lo miró con algo de odio, su inesperada aparición hizo a Jimin separarse.

—Anoche no llegaste al dormitorio, solo me dijiste que irías con tu omega y ya de ahí ni una palabra —arregló sus rubios cabellos mientras se acercaba a ambos.

—Y así fue, fui a la casa de mi omega y me trató muy bien, cenamos juntos —posesivamente tomó la cintura de Park.

—Oh, Jimin, este tonto no nos presentó, soy Kim Taehyung —extendió su mano para que el omega la tome y hagan un saludo.

—Buen día, Taehyung, soy Park Jimin —aproximó su mano saludando al alfa.

—Que bonito apellido, eres tan hermoso como te describen en las revistas de tu familia, tal vez más —en realidad no le estaba coqueteando, solo quería molestar a Jungkook.

Jeon los dejó saludarse sin problema, pero cuando vio la mirada y tono de voz de Taehyung, tomó la cintura de Jimin con un poco más de fuerza alejándolo de Kim, soltando involuntariamente feromonas dominantes.

Los alfas dominantes solían soltar feromonas cuándo sienten que están atentando contra él o contra su omega, los alfas normales se alejan de las advertencias que dan a entender las feromonas dominantes.

Eso estaba pasando en ese momento, Jungkook abrazaba a Jimin mientras soltaba feromonas dominantes y Taehyung empezó a reír pese a las advertencias de aquellas feromonas.

—¿De qué te ríes?

—¡Es que te molestaste tan fácil! —se agachó agarrándose el estómago por la risa.

—¿Lo hiciste a propósito? Agh, siempre con tus cosas, ya ve a donde quiera que estabas yendo, nosotros ya tenemos que irnos —gruñó levemente dándose la vuela aún con Jimin en brazos.

—Bien —terminó de reír—. Iré un poco antes del medio día a tu trabajo a ver a ese lindo trabajador, ¿cuál era su nombre? ah, cierto, Hoseok.

Y el alfa se dio la vuelta hacia su trabajo de medio tiempo.

—J-Jungkook... me asfixias —Jimin habló con lo que le quedaba de aire, pues cuando Jungkook lo abrazó, pegó su rostro contra su pecho.

—¡Lo siento! ¿Estás bien? ¿Te sostuve muy fuerte? Lo lamento, no era mi intención hacerte daño —preocupado lo soltó revisando el rostro de su omega.

—No, solo me dejaste sin aire —en realidad le gustó ser abrazado fuertemente por aquellos protectores brazos, se sentía seguro, pero no podía decírselo, le daba demasiada vergüenza.

—Lo siento de todas formas —lo volvió a abrazar, pero delicado y cariñosamente.

Tal vez me estoy encariñando mucho contigo...